Han pasado semanas desde que aquel sujeto intento robarse un carro en el estacionamiento del Decanato, y aunque parezca insólito; el silencio y el olvido terminó como siempre apoderándose de las aulas de clase, de los salones de estudio, de los pasillos, de las plazas y de los sitios de común paseo por la comunidad estudiantil, ni si quiera fue suficiente el hecho que a solo dos días del impactante suceso que vivimos hayan pasado unos sujetos a horas de la noche en una camioneta disparando hacia el Decanato, cuando supe eso, llore de miedo, no tuve otra manera de reaccionar (tampoco fue que rompí en llanto… solo fue un impulso).
Gracias a Dios ese día, viernes, no hubo clases; desde aquel miércoles de “los hechos” las clases se habían suspendido hasta el lunes próximo para calmar a la gente, pero lo que paso el día de los tiros obviamente no fue algo sin importancia como lo quiso hacer ver el Centro de Estudiantes y las Autoridades del Decanato, para mí algo bastante delicado y que podría encender el pánico en la universidad, pero paso entre cortinas. Yo sigo creyendo que las acciones tienen reacciones, y más cuando se trata de cosas así, y mucho más aun cuando alguien termina con fracturas múltiples en la cabeza, menos 4 dientes y con una posible ceguera permanente, de hecho la cosa no está nada fácil.
Esa semana se hicieron protestas y se converso con las autoridades estadales, todo chévere, todo fino, todos satisfechos con las palabras que se decían por allá, y que retumbaban por acá, pero me parece tan increíble lo crédulos que pueden ser las personas, los policías en el Decanato solo duraron una semana, y todas las propuestas de seguridad quedaron como propuestas, que cómico es que la gente se deja engañar tan fácilmente, por ahora aun siguen pidiendo los carnets cuando uno entra al Decanato, claro no ven tu foto, no ven tu nombre, pero tienes carnet, eso es importante, vamos a ver hasta cuando dura el teátrico de los carnets, porque tanta seguridad me agobia en realidad.
Ya varias veces me he visto muerto (… me paso de fatídico) cuando me bajo de un carrito frente al Decanato y pasa una moto justamente cuando estoy en la isla de la avenida, pienso que pasará algo como en las películas del Sicario, que imaginación la mía, pero sé que eso no solo pasa en películas, pero si me pongo en una de CSI: DIC no es difícil pensar que si algo llegaran a tramar esta gente que salió destrozada de la universidad no sería una semana después, ni un mes, ni si quiera en tres meses sino mas…. Claro está que viendo bien la estrategia que tenia se nota que no son brutos, saben hacer sus cosas, y da miedo.
Lo que me asusta es que la gente se está olvidando de lo que paso, y que están retomando sus rutinas de siempre, sus comportamientos y hábitos de todos los días, si le hacen daño a uno, nos hacen daño a todos.
Sin bases matemáticas, FaCt0r C0mUn Cer0…
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